LA MUJER SÉNIOR 1/2

Las desigualdades de la mujer sénior no aparecen en las últimas etapas de la vida, sino que se avivan durante todo el ciclo vital.
El género, como construcción social, revela diferencias de pensamiento, de rol, de salud, económicas, políticas, laborales, etc. y en la vejez, estas diferencias son aún mayores.
Este es el primer de los post relacionados con la mujer sénior, desstacando el papel que la mujer sénior ha desempeñando en la sociedad. En este post encontrareis lecturas, experiencias y vivencias que durante años me han trasmitido. Por ello no busquéis un artículo científico o académico porque no es esta la intención.
En España, la esperanza de vida al nacer ha pasado de 77,07 años en el año 1991 a 83,50 años en el año 2018. La esperanza de vida de las mujeres es de 86,30 años, y el de los hombres de 80,70 años, en el 2018.
Esta diferencia es relevante, ya que la mujer senior deben tener en cuenta que al vivir más años, también vivirán más como jubiladas, de tal manera que si quieren mantener el mismo nivel de vida, una vez jubiladas, deberán acumular más recursos a la edad de jubilación.
GENERO
La cultura y género son determinantes en el proceso de envejecimiento, especialmente el género, que es una variable que condiciona todo el curso vital.
Según la RAE, se define genero como: atributos socialmente construidos, roles, actividades, responsabilidades y necesidades predominantes relacionados con la pertenecía al sexo masculino o femenino en determinadas sociedades o comunidades en un momento dado.
La mujer senior participa, de forma preferente, a través del espacio privado que le provee la familia, siendo su principal actividad el cuidado de otros, por lo que es socialmente vista como un sujeto improductivo.
Es el contexto sociocultural, las actitudes hacia los roles de género que hacen más aceptable que las mujeres tengan un trabajo fuera de casa.
Parece existir un enfoque muy influenciado por la productividad, dentro del desarrollo de políticas en relación con el envejecimiento activo. Es imprescindible un enfoque comprensivo, sensible al género, que servirá para dinamizar y generar conocimiento sobre el papel del género en la vejez.
Focalizando en una serie de temas de interés central para el envejecimiento activo en el ámbito de la seguridad, como son, el maltrato que pueden sufrir las personas mayores, por violencia de género o por parte de las personas que les cuidan, la sexualidad e identidad de género, la autonomía sobre las decisiones, y el control sobre la propia vida, vemos que todos ellos son temas de especial relevancia para las mujeres seniors.
Tampoco el feminismo ha prestado la atención que se merecen las condiciones de vida de las mujeres seniors . Cuando se han tratado, ha sido una excepción.
Diferentes aspectos de las desigualdades en la mujer sénior:
EDAD
En la edad, los patrones de género establecen un doble rasero para hombres y mujeres, acerca de estas dimensiones de la edad y de su propio envejecimiento, y la diferente aceptación social de la sexualidad para unos y para otras.
Especialmente relevante es la diferente aceptación social que se muestra ante una relación sexual entre un hombre mayor y una mujer joven. Mientras que en el caso contrario, entre una mujer mayor y un hombre joven, se tiende a ridiculizar y a poner en cuestión.
La edad y el género, quedan definidas dos discriminaciones: la de ser mayor y la de ser mujer. El mensaje que se transmite a las mujeres mayores en nuestra sociedad es que deben esforzarse por seguir pareciendo jóvenes.
El próximo día 14 de mayo, encontraréis la parte final, de mujer senior.